Foto: Colgante mariquita realizado en platino con esmaltes y diamantes, de Tiffany & Co. / GIA.
Durante miles de años el ser humano ha buscado atraer la buena suerte y conseguir los deseos más preciados.
Muchas gemas se han usado para este fin, pues a menudo simbolizan el poder y lo positivo.
También algunos amuletos como el trébol de cuatro hojas o la mano de Fátima, mundialmente conocidos.
O la mariquita, portadora de buena suerte, que en la Edad Media era símbolo de protección y señal de que las mujeres solteras encontrarían su verdadero amor.
Y algo curioso, en 2010 un equipo de psicólogos de la Universidad de Colonia, en Alemania, llegó a la conclusión de que la creencia en amuletos de la buena suerte mejoraba el rendimiento con su uso.
